Flexiones de brazos

El ejercicio que describiré a continuación es uno de los más sencillos y que a la vez está al alcance de la mano de cualquier persona. Se trata de las flexiones de brazos, ejercicio que todos hemos hecho alguna vez en nuestra vida.

Es una rutina en la cual se involucra toda la parte superior de nuestro cuerpo, desde la cintura, abdomen, pecho y sobre todo brazos y hombros. Hace que nuestra figura resulte más esbelta y robusta, dependiendo claro está de la cantidad de repeticiones que a la larga vayamos realizando.

Antes de dar inicio tanto a este ejercicio como a cualquier tipo de actividad física es muy importante realizar una serie

de calentamientos siempre destinados a las zonas sobre las cuales vayamos a ejercitar. Si vamos a correr es importante estirar muslos, gemelos, rotar rodillas y tobillos, etc., si como en este caso nuestro ejercicio se destina a la zona de tronco superior y brazos lo importante será activar brazos, muñecas, cintura, etc. Una vez realizados este pequeño calentamiento durante aproximadamente unos 5 min iremos a por el ejercicio en si.

Para los que no hayan hecho nunca flexiones o les cueste hacerlas recomiendo que los primeros días unicamente hagan 3-4 sesiones de unos 20 segundos tubados en el suelo y aguantarse únicamente con los brazos extendidos y apoyados  en el suelo como muestra la imagen 1. Es importante mantener el tronco recto, el abdomen contraido y no dejar caer la pelvis.

Una vez conseguido este primer paso y haber estado realizando este ejercicio durante unos días daremos inicio a la flexión. Las manos deben estar lijeramente separadas de la perpendicular de los hombros y a partir de aquí procederemos a la flexión de los brazos hasta que los codos se coloquen en angulo de 90 grados. Inicialmente es importante no bajar más.

Las primeras repeticiones no deben ser excesivas y dejarnos en la extenuación. Siempre es importante realizar 3 series de las repeticiones que creamos que podemos hacer sin problemas y a partir de de aquí día a día ir aumentando la dificultad. Si aún así consideramos que nos cuesta mucho realizarlas podemos optar por ayudarnos con el apoyo de las rodillas tal y como se indica en la imagen.

Para los que ya están acostumbrados a este tipo de ejercicio y las repeticiones puedan llegar como mínimo a las 30-40, existen una serie de variaciones que harán que el desarrollo de los músculos sea más concreto, como por ejemplo colocar las manos juntas en forma de diamante, hacer el paso de lagarto, en declive, con apertura de manos etc.